Con 24 años mostrando al mundo la verraquera Colombiana
Camila Mesa, egresada de la Escuela de Diseño y Mercadeo de Moda Arturo Tejada Cano, es una diseñadora emprendedora de moda colombiana, de carácter y con el sueño de dejar el nombre de su país en lo más alto de la cima a nivel mundial.
Es además una mujer apasionada por el diseño y la creación de productos a partir de la identidad de su país, desea rescatar al 100% las técnicas artesanales que se han ido perdiendo con el tiempo y que deben ser, por siempre, lo que representa a un lugar lleno de riquezas, no solo materiales sino de tradición y alma como lo es Colombia.
Sus padres han sido los responsables de mostrarle todo lo que puede lograr a partir del amor por sus regiones. Ha tenido la oportunidad de conocer Colombia, identificando las diferentes tradiciones de los pueblos, y llevando consigo algo más preciado que el oro… el conocimiento.
Su padre Juan Ricardo Mesa, piloto, quien la ha impulsado a viajar y conocer nuevos lugares, y su madre Angela Patricia Ramirez, diseñadora textil, transmitiéndole el conocimiento y la creatividad necesaria para la creación de materiales, textiles, tejidos e hilos, así como las técnicas que son la razón de ser de la marca, siendo pioneros de su conocimiento para comenzar a producir sus primeras prendas, y la construcción de una marca que llevaría el talento Colombiano a lugares que ni ella misma imaginó.
La marca que lleva su nombre, Camila Mesar, es una empresa de emprendimiento, donde su máxima inspiración es “nuestra tierra” y las técnicas propias del país. Ella fusiona el arte del macramé con técnicas modernas para lograr crear un producto único y exclusivo, logrado fusionar la sastrería tradicional con la moderna, enfocada hacia las mujeres, recatando las técnicas que hace un tiempo atrás eran legados de padres a hijos y que hoy en día se han perdido.
Camila pretende mostrar la artesanía, no como un elemento de decoración sino como un elemento funcional que puede hacer parte de nuestras vidas, además de identificar a quien la porta.
Así mismo, el objetivo es recuperar la tradición y que los jóvenes vean en la creación y elaboración de tejidos, un futuro y una forma de vida que puede llegar a ser muy rentable sin dejar atrás sus raíces, contando historias por medio de las prendas.
La idea de crear un producto híbrido, comenzó con la herencia de conocimiento de los familiares de Camila en Nemocón, quienes se dedicaban a tejer productos en Crochet, a dos agujas y el mismo macramé.
Camila Mesa se caracteriza por el desarrollo de prendas que llevan consigo, el alma del artesano que lo construye. Lo más hermoso de trabajar con los artesanos, afirma Camila, es que, más que crear un grupo de trabajo se ha logrado formar una familia muy valiosa para la marca. Desde la creación de los hilos, pasando por los tejidos, los telares y finalmente por la confección de la prenda, cada uno de estos pasos, tiene una historia detrás, una historia que debe ser contada, puesto que en las manos de sus creadores existe una cantidad infinita de experiencias y conocimiento.
La marca, por tener un estilo atemporal, hace que sus prendas, se puedan utilizar de forma versátil, puesto que logra vestir a la mujer en diferentes ocasiones de uso sin importar el lugar, son prendas que se adaptan tanto día como noche, sin perder el estilo y la elegancia y resalta la “Colombianeidad”.
Actualmente Camila Mesa está enfocada en mostrar el producto en el exterior. La marca ha hecho parte de varios eventos internacionales brindándole la oportunidad de explorar nuevos campos y espacios donde ha sido admirado el trabajo manual. Eventos como La Semana Latina de Moda en Chicago, Estados Unidos, Casa Santa María en Bogotá, Colombia, y otros realizados en París, Francia, han demostrado que el público extranjero admira con fervor el producto artesanal hecho a mano.
A futuro le gustaría poder regresar a Colombia con una marca ya posicionada, para poder crear alianzas con casas de moda, distribuidores y marcas, con el fin de mostrar el producto en el lugar que le dio vida a esta idea.
Por: Fernanda Palma, Dayana Arcila y Laura Fonseca.