Revancha: El «Boom» de la ropa usada en Bogotá

Cortesía Sandra Calderón

La marca colombiana que brinda una nueva oportunidad a prendas que han sido olvidadas a través del tiempo

Con el paso de los años la sociedad consumista de la moda generó la necesidad por incrementar la producción en prendas cíclicas, que suplieron el constante afán de las personas por comprar y renovar con mayor frecuencia sus prendas de vestir o accesorios del uso cotidiano.

Este viraje en el mercado de la moda ya no se basa como en décadas anteriores, donde se adquieren prendas que tenían una carga simbólica o emocional que se identifique con el comprador para que esta perdurará en el tiempo; sino al contrario, aumenta el deseo de poseer más prendas a través de su acumulación para ser usadas solo una vez y debido al constante cambio de tendencias o inspiraciones, dejando a un lado o en el bote de basura más cercano.

Cambiar esta mentalidad ha demandado varios años, por esta razón es normal hoy observar en muchas ciudades del mundo la llegada de contenedores de ropa reciclada, lo cual demuestra no solo el incremento en la compra de productos de segunda mano; sino una tendencia que se consolida diariamente gracias al rediseño de estas prendas. Con el fin de generar un nuevo producto a la hora de la confección, se agregan detalles para reconstruir piezas para que queden completamente nuevas donde se les brinda un uso diferente; gracias a esto se ha logrado crear iniciativas como ventas de garaje o la creación de marcas dedicadas a reutilizar ropa para lograr concientizar a la sociedad, dejando de lado aquellos prejuicios sobre el uso de la “ropa usada” para obtener un modelo de consumo sostenible y una opción más sensible hacia el medio ambiente.

Cortesía Sandra Calderón

En Bogotá esta iniciativa ha presentado un alto crecimiento y gran acogida por parte de la sociedad, en la ciudad la compra y venta de ropa usada es un negocio que maneja grandes cantidades de dinero, actualmente existen diferentes marcas donde en su portafolio incorporan la venta o intercambio de prendas que ya han sido usadas y que pueden ser vendidas a personas que desean darles una nueva oportunidad en su guardarropa.

Una de las marcas locales más reconocidas y posicionadas de Bogotá es Revancha, dedicada a la reventa de ropa “vintage”, término que hace referencia a aquellas prendas y accesorios que tienen cierto periodo de antigüedad, las cuales suelen ser piezas hechas a mano. Este estilo se nutre de todas esas ideas de rebelión, creatividad e inconformismo por parte de la sociedad en los años 20 que consiguió cambiar la apreciación hacia la ropa usada y convertirla en un objeto deseado.

Revancha le da esa segunda oportunidad a las prendas que tuvieron un gran auge entre los años 80 y 90, que se encuentren en buen estado para ser usadas por otras personas; su portafolio incluye chaquetas de denim, rompe vientos, prendas en cuero o gamuza, todas estas con un toque único que al usarlas no solo crean un estilo retro si no que plasman una historia. Esta marca brinda prendas únicas que están dirigidas a cualquier tipo de personas, no tiene un género ni una edad definida, cuenta con un factor diferencial en la ciudad, al ser prendas que no se encuentran en ninguna tienda de Colombia.

Cortesía Sandra Calderón

Esta marca surge en el momento en que Sandra Calderón, dueña de la marca y estudiante de fotografía vivía en Alemania, planeando su regreso a Colombia con recursos limitados para pagar su equipaje de bodega, decidió enviar todas sus prendas en una caja con destino a Bogotá, con el paso del tiempo su equipaje nunca llegó a Colombia, al verse en esta situación y con poco dinero Sandra decidido promocionar sus prendas por medio de las plataformas digitales para lograr subastarlas. Allí nació este modelo de negocio generando un impacto muy positivo en las personas que deseaban darles una segunda oportunidad a las prendas, creando una empresa sostenible y amigable con el medio ambiente.

En sus inicios fue complicado entrar al mercado, ya que “el concepto de ropa usada era muy estigmatizado, intentar cambiar la mente de personas que prefieren comprar prendas nuevas y de marca, es difícil pero luego de que personalidades a nivel global hayan probado este estilo de vida y lo hayan compartido genera una gran emoción para que muchas personas se estén apuntando a esta tendencia”.

Actualmente Revancha es una de las tiendas de segunda más conocidas en Bogotá, aunque no cuenta con un local físico, sus productos son promocionados y vendidos a través de las plataformas digitales especialmente vía Instagram, transmite “alegría y buena onda, que las personas se sientan cómodas con nuestros productos y que sobre todo que cada persona se sienta única con la prenda que lleve puesta”.

Esta marca no quiere caer en la dinámica del negocio actual de la moda, vendiendo prendas desechables con un único uso donde no logran transmitir emociones, ni contar una historia por medio de ella; por eso la marca quiere mostrar su diferenciación a partir de piezas únicas de marcas importantes a nivel global que han sido olvidadas en diferentes lugares del mundo y que puedan ser usadas en Bogotá por personas que se ha quitado el estigma de la reutilización de prendas. El objetivo principal es extender el ciclo de vida de las piezas logrando explicar que este ciclo va más allá del “comprar y botar”, saber que si se adquiere, se usa y luego se puede vender a quien esté interesado es lo más importante, esta persona se va a empoderar de esta prenda, sin importar si sea de marca o no o si ha sido usada por alguien, “deseo que las personas se quiten el tabú de que las prendas usadas tienen que ir a la basura, si no que comprendan que todo mientras esté en buen estado puede tener una segunda vida en manos de otro dueño”.

Escrito por Daniela Pinzón y Lina González